Ricos Inventos

Ayer estaba con la Maestra Lulú. La había acompañado a comprar unos zapatos y luego nos fuimos a mi casa a ver unos videos. Y entre video y video le estuvimos poniendo como conejitos. Ya le habíamos puesto un par de veces, y después de la segunda vez nos quedamos recostados sobre la cama desnudos platicando y descansando de tanto sexo...

De pronto, como sé que le gusta mucho que le haga cariñitos (cosa que además a mi me gusta hacerle) le empecé a acariciar su espalda, luego me senté sobre ella y continué acariciendo su espalda como por unos 10 minutos, despues le empecé a besar su cuello, su espalda por un ratito. De pronto sentí como su piel poco a poco se iba erizando mientras yo seguía respitrando sobre su espalda, pasando mislabios y mi lengia por ella...

Poco a poco fui bajando y llegué a su bello trasero y me pasaba de uno a otro, besandola lentamente, haciendo que sintiera mi aliento y labios sobre ella, pero todo esto lo hacía de la manera más natural...fue un proceso lento en inconciente, de pronto, me encontré muy debajo de su trasero y poco a poco le fui metiendo la lengua entre sus piernas...

Esto ya lo empecé a ahcer como de inercia, pero la verdad no creí que fuera a lograra tener otra erección ya que habiamos tenido sexo un par de veces y la segundo había sido unos 15 minutos atrás, pero le empecé a meter la lengua, y de pronto ella empezó a soltar gemidos, y yo me empecé a exitar...

Después de unos minutos de lamerla toda, y de que ella levantaba su trasero para mi lengua entrara más dentro de ella, se voltió y en su rostró podía ver lo exitada que estaba, abrió sus piernitas y se la empecé a meter.

Empezamos lento, muy lento, suavecito y rico, ella me abrazaba la espalda, me apreptaba el trasero mientras cerraba sus ojos y estiraba su cuello, y yo embobadísimo veía como se exitaba. Y de pronto...la desgraciada de la Maestra Lulú empezo a exitarme de una manera que sólo ella sabe como. Se empezó a acelerar, a gritarme cada cosa mientras me nalgueaba bien fuerte, "Te exita? Te exita? Te gusta cogerme verdad? Te gusta que te nalguee verdad? Cógeme! Cógeme!" Yo apendejadísimo apenas y le contestaba, hasta que ya no pude más y me vine junto con ella de la manera más deliciosa...

Después de terminar, empezamos a reflexionar de la fomra en que nos empezamos a calentar, y de como todo empezó porque le emepecé a hacer cariñitos y poco a poco todo fue dando pie a que terminara con mi cara incrustrada en su trasero mientras le metía la lengua, a lo que ella comentó...

...ay...que ricos inventos!